Reflexión

Añadiendo a nuestra fe...Propósito

Cuando nos vamos acercando al final de algún momento en particular de nuestras vidas, dígase fin de año escolar o la culminación de una etapa académica; casi completar un trabajo o a punto de tomar una importante decisión... un poco más y llegamos a la meta

Siempre llega el cansancio mental, emocional, físico y, en ocasiones, hasta espiritual. No falla en llegar el momento en que nos preguntamos: ¿Valdrá la pena este último esfuerzo, dar este próximo paso, tomar esta importante decisión, caminar una milla más, completar lo que en un momento dado comenzó y está próximo a terminar?

Es en estos momentos de reflexión y evaluación que llega a mi mente y corazón la promesa esperanzadora y fortalecedora a través del salmista que escribió con convicción:

"Jehová cumplirá su propósito en mí.
Tu misericordia, oh, Jehová es para siempre.
Tú cumplirás en mí todo lo que has pensado hacer.
Tu amor por mí no cambia."

Esta es la declaración que afirma la presencia acompañadora de Dios en todas las etapas de nuestra vida. Es la promesa que enriquece la oportunidad de creer que hay sentido, significado y propósito en cada momento vivido. Es la invitación a buscar la lección en cada camino emprendido. Es el reto de vivir día a día con sentido porque Dios cumplirá sus pensamientos acerca de nosotros y podemos descansar en su misericordia y amor.

Es en esta certeza que te invito a que, en medio quizás del agotamiento o del pensamiento de si ha valido la pena, abras paso a la voz transformadora de Dios que hoy nos recuerda que Él tiene propósito con nuestras vidas y lo ha de cumplir.

Que el privilegio de saber que Dios está pensando en nosotros nos motive a caminar la milla extra, a completar la carrera, a finalizar esta etapa, a completar este año escolar... a llegar a la meta para añadir a nuestra fe...¡Propósito!